Primero déjeme presentarme, me llamo Remco tengo 21 años, soy holandés y estudio International Technology Management en la Hanze Universidad de Groningen. Dentro de esta especialidad, existe la posibilidad de realizar un período del estudio en el extranjero, y por eso decidí venir a Valencia.
Todo comenzó el 8 de septiembre de 2008. Tomé la decisión meses antes, basándome en la recomendación de un amigo. Él me contó que el tiempo, la gente y la vida en general es estupenda. También me dijo que la formación académica era muy buena. Todo esto hizo que viniera a Valencia con grandes ilusiones, solamente tenía un poco de miedo por si me había fijado unas expectativas demasiado grandes.
Otros dos compañeros de estudios me acompañaron y con ellos compartí un apartamento. Fue estupendo porque desde el principio no estuve solo. Encontramos un apartamento agradable y se nos unió una persona más, un chico de Irán que era un individuo “muy especial”.
Solicité una beca del European Project Semenster (EPS) en la Universidad Politécnica de Valencia. El proyecto comenzó el 23 de septiembre y pude disfrutar de dos semanas de libertad para conocer la ciudad. Estas dos semanas me dieron una impresión agradable de la ciudad , especialmente de la playa y de la vida nocturna.
Después comenzó el período de estudio del EPS. Una de las cosas que inmediatamente no me gustó del EPS era que no había estudiantes locales, lo que significa no conocer ningún estudiante español con quien poder hablar y ninguna oportunidad de mejorar mi español.
No me entienda mal, los estudiantes de Erasmus eran estupendos. Hice muchos amigos en las primeras semanas con el resultado de que , al final, no sabía como mantener el contacto con todos ellos. Solamente había una solución: ¡ salir casi cada noche! Esto fue muy bien durante los primeros dos meses. Pero después de esto, comprendí que también quería sacar más provecho de mi estancia en España. Me apunté a un equipo de fútbol, y también hice judo, con el fin de practicar deporte y relacionarme con gente de aquí, pero todavía tenía la sensación de que podía hacer más. Me llevó un tiempo pero al final encontré algo muy interesante: la fundación.
A partir de ese momento, y para conseguir una visión completa de España, intenté viajar cuando me fue posible. Viajé a Barcelona, a Madrid, a Granada y a muchos otros lugares. Estos lugares me demostraron que España tiene mucho que ofrecer y que es un país realmente hermoso. También hizo que comprendiera lo bueno de Valencia y por qué me gusta tanto esta ciudad.Valencia tiene todo lo que una ciudad grande puede ofrecer: una buena oferta turística, una gran cultura, por no hablar de los deportes, la vida nocturna y muchas cosas más. Pero lo más especial de Valencia es su atmósfera. Esto hizo que quisiera permanecer por un período más largo. Comencé a buscar un lugar para realizar unas prácticas de estudios en Valencia, y finalmente lo encontré y esa es una de las razones por las que estoy escribiendo este artículo.
Durante mi tiempo en Valencia también conocí a un español llamado Setu. Él fue realmente mi primer amigo español. Me informó sobre la fundación y me ayudó con muchas cosas, por lo que le estoy muy agradecido. Él también me habló del propósito de la fundación y me preguntó si quería participar, y le dije que estaría encantado de formar parte de ella.
Finalmente, decirle que Valencia no sólo me cautivó el corazón y satisfizo todas mis expectativas , sino que también me dio, y me sigue dando, otra perspectiva de la vida.